¡VIVA EL PARO NACIONAL DEL 26
DE SETIEMBRE!
En la presente coyuntura la Educación Superior
esta en cuestionamiento; su responsabilidad frente a los procesos de globalización
en curso; la forma como asumimos la revolución científica y tecnológica…
¿independencia o dependencia? ¿Planificada o consumista?; y, como se consolida el
conocimiento, nacional y mundial, como un factor indispensable para el desarrollo
económico y social de la región y del país, respetando el ecosistema. Es decir,
se reconoce que es un factor fundamental para el desarrollo competitivo del
país y su impacto en la productividad y bienestar son directos
En
este proceso de debate, la educación que se brinda en los Institutos y Escuelas
de Educación Superior no ingresa como tema; el Statu Quo solo considera a las Universidades como Educación Superior
y los medios de comunicación escrita y televisiva son concordantes con ello o
en su defecto lo difunden, con displicencia, como Educación Superior no
universitaria.
Exigimos que la concepción de la Educación
Superior sea coherente con el Estado de Derecho; según la Ley General de
Educación, artículo 51º, “Educación Superior considera a los Institutos y
Escuelas de Educación Superior”; y, la Ley 29394, Ley de Institutos y Escuelas
de Educación Superior, es más específica. Somos Educación Superior
La realidad del país, muestra que la educación superior
que se brinda en los Institutos y Escuelas de Educación Superior ha contribuido
de manera permanente en el crecimiento económico del país. Con los
profesionales técnicos que ejercen el control de las maquinas y procedimientos
en el aparato productivo y, también, con profesionales de la educación y del
arte que ejercen su función, en las pésimas condiciones que el gobierno oferta,
en todo los rincones del país. Con la capacidad emprendedora de nuestros egresados
que contribuyen formando micro y pequeñas empresas; es decir, contribuye, en
términos generales, a desarrollar la productividad laboral, la energía empresarial
y con ello la calidad de vida; a promover la movilidad social y a fortalecer la
sociedad civil.
En ese sentido, la competitividad que el país requiere
depende de una cultura de innovación, ciencia y tecnología que involucra
políticas nacionales que vincule educación, trabajo y producción; logrando una
inserción a los mercados globales del libre comercio con independencia
tecnológica. En esta línea los
Institutos y Escuelas de Educación Superior reclaman con energía, un nuevo Sistema de Educación Superior que
lo libere de las condiciones anacrónicas donde se desenvuelve y que
imposibilitan su desarrollo. La centralización de los recursos económicos
en las DREs imposibilitan un manejo rápido, eficiente y eficaz; la frondosa
normatividad académica, centralizada por el MED, impiden respuestas rápidas en los cambios de los
puestos de trabajo que implican modificación de los perfiles profesionales; por
otro lado la asignación de bajos presupuestos para los Institutos y Escuelas de
Educación Superior, que al no ser unidades ejecutoras, se disemina en la DRE y
el MED; por lo que, las estructuras organizativas obstaculizan su articulación
productiva, empresarial y de investigación tecnológica – humanista con su medio
socioeconómico.
Exigimos un cambio
que sea una ruptura con este pasado infame. Pasado que
representa la postración y aniquilamiento de los Institutos Superiores
Públicos; durante los últimos 20 años de gobiernos de turno. Esta tendencia de vida institucional se ha vuelto
anacrónica, se ha estancado en el pasado. Y todo lo que se
estanca, se pudre, se empantana y de un pantano no precisamente nace una flor
porque está infectado, corrompido.
En ese
sentido, respaldamos el proyecto de Ley de LOF del MED donde se plasma la
creación del Vice Ministerio de Educación Superior. Pero a su vez, demandamos que en las funciones de este
Vice Ministerio de Educación Superior se incorpore el ejercicio de la autonomía
académica, administrativa y económica de los Institutos y Escuelas de Educación
Superior y que, a su vez, posibilite el cultivo del
pensamiento crítico-reflexivo-tecnológico como aspecto principal del proceso
enseñanza aprendizaje ligado con el desarrollo de habilidades y destrezas
motrices específicas y pertinentes de cada especialidad. Contribuyendo, de
manera efectiva, en el desarrollo del mercado interno y la convivencia en democracia y en
la diferencia de todas las sangres; con su inevitable inserción al mercado
global y la defensa del ecosistema.
Concomitante con la vigencia y desarrollo de los
Institutos y Escuelas de Educación demandamos
el cumplimiento del Plan de Adecuación, resolver el CAP de cada Instituto para
asegurar nombramiento de los docentes contratados y una la Ley de la
Carrera Pública
de los Docentes de los Institutos y Escuelas de Educación Superior que lo
dignifique con remuneraciones y condiciones laborales que posibilite su
desarrollo individual y su compromiso con el desarrollo del país
¡POR UN VICE MINISTERIO DE EDUCACION SUPERIOR QUE VIABILICE LA
AUTONOMIA ADMINISTRATIVA, ACADEMICA Y FINANCIERA DE LOS INSTITUTOS Y ESCUELAS
DE EDUCACION SUPERIOR!
¡POR LA VIGENCIA Y DESARROLLO DE LOS INSTITUTOS Y ESCUELAS DE
EDUCACION SUPERIOR!
¡POR IGUALDAD DE REMUNERACIONES DE LOS DOCENTES CONTRATADOS!
¡POR UNA LEY DE CARRERA PUBLICA QUE DIGNIFIQUE Y VALORE LA FUNCION
DOCENTE DE EDUCACION SUPERIOR!
CEN
SIDESP / SETIEMBRE 2013